Fue un largo día en el hospital. Todavía no había respuestas sobre la enfermedad que aquejaba al brillante joven de 19 años de edad. Al llegar a casa, la familia se sentía desanimada. Se sorprendieron al ver una caja hermosamente adornada en el escalón, con Isaías 43:2 impreso adelante. Adentro, había diversos versículos bíblicos alentadores que sus amigos habían escrito a mano. Pasaron la hora siguiente siendo alentados por las Escrituras y el gesto amable de los amigos de la familia.

Las personas que atraviesan momentos difíciles o desafíos familiares pueden beneficiarse siempre de un apoyo de corazón. Las Escrituras —ya sea un pasaje largo o un solo versículo— pueden alentarte a ti, a un amigo o a un familiar. Isaías 43 está lleno de pequeños trozos de aliento. Considera algunos conceptos destacados: Dios te creó, te formó, te redimió y te llamó por tu nombre (v. 1). Él estará contigo (v. 2), es el «Santo de Israel» y es nuestro «Salvador» (v. 3).

Al considerar las promesas de Dios, que estas te alienten. Y mientras Él provee lo que necesitas, puedes alentar a otros. La caja de los versículos no costó mucho, pero su impacto fue invalorable. Aun después de cinco años, la familia sigue apreciando algunos de esos versículos.

De:  Brent Hackett